La artritis psoriásica es una enfermedad crónica, no contagiosa, que se caracteriza por una inflamación de la piel (psoriasis) y de las articulaciones (artritis). Las lesiones de la piel pueden tener diferentes aspectos y tamaños, lo más frecuente es la presencia de placas rojas con escamas que se localizan cerca de codos, rodillas, el cuero cabelludo, las orejas y el ombligo. La artritis psoriásica comienza generalmente entre los 40-50 años, afecta por igual a hombres y mujeres; se presenta como inflamación de pocas o varias articulaciones en manos, pies, rodillas y tobillos. Por lo general suele presentarse primero la psoriasis y después se agrega la artritis. Además se puede presentar inflamación de algún dedo de manos o pies dándoles la apariencia de salchicha (dactilitis); dolor en los sitios de inserción de los tendones a los huesos (entesitis); dolor de espalda baja y afección de uñas.